En los últimos tiempos, los vuelos sobre el norte de la India son cada vez más frecuentes. Lejos de encontrarnos con independentistas de Cachemira, con fuerzas del ejército pendientes de sus homónimos de Pakistán, o con pruebas nucleares en el desierto del Thar, que los hay de todos ellos, hemos hallado un país bello, con un gastronomía ardiente y una muchachas de atractiva piel aceitunada.
Pruebas de color para Rajastán (2008).
Als darrers temps, els vols al damunt del nord de la India son cada vegada més freqüents. Lluny de trobar-se amb independentistes de Catxemira, amb forces del exercit pendents dels seus homònims de Pakistan o amb proves nuclears al desert del Thar, que hi han de tots ells, hem encontrat un país molt bonic, amb una gastronomia ardent i unes xicotes de atractiva pell de color oli.
Proves de color per Rajastán (2008).
1 comentario:
¡Pero cuánto has trabajado...!
:)
Lo del biberón ha sido toda una sorpresa. Ajustar motores no quita la suavidad del tacto ¿no es cierto?
Un Mechor Mombo jovencito en esta historia drogo-taurina. No tenía ni idea de que Luis Alberto de Cuenca le gustaran los tebeos. Eso me lo revaloriza como persona, mira.
Me alegro de que te vayas salvando de terroristas varios y que haya chicas guapas por ahí. Siempre es gratificante que, encima de que no te pase nada, poder disfriutar de buenas vistas.
Mañana iré a ponerme al día con las aventuras de tu hijo.
Mientras tanto te dejo un fuerte abrazo, amigo mío.
:)
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